Una vez entendido que todos los géneros discursivos persiguen propósitos retóricos más o menos explícitos, se entiende también que todos ellos tengan lectores potenciales, así sea uno mismo. Y que estos lectores potenciales implican también una tarea. Esto es, tener claridad sobre a quién le estoy escribiendo y para qué.
Los escritores, por lo tanto, tienen que aprender a adecuar sus textos a las características del lector potencial, con base en el objetivo social del género discursivo empleado, y dentro de la tarea específica que demanda la escritura.
Así pues, escribimos con múltiples propósitos: para comunicarnos con nuestros pares a través de mensajes multimedia, para que nuestros conocimientos sean evaluados por un profesor a través de trabajos académicos (ensayos, reportes de lectura, entre otros), para postularnos como aspirantes a un empleo a través de un currículum vitae y carta de presentación, entre muchos otros ejemplos.
En todos los casos, la escritura tendrá que adecuarse al nivel de conocimiento y exigencia del lector, ya que no es lo mismo escribir para personas que desconocen del tema del que hablamos, que para aquellas que son expertas en la materia. Y tampoco es lo mismo escribir para personas que esperan o desean leernos, que para aquellas que serán impelidas por nuestro texto.
2 Replies to “EL LECTOR”
EL GÉNERO DISCURSIVO – Letramento
[…] Regresar a: La Comunidad Discursiva Continuar con: El Lector […]
EL ESCRITOR – Letramento
[…] Regresar a: El Lector Continuar con: Géneros Escolares […]